miércoles, 18 de enero de 2012

VED EL VÍDEO.

http://rosamariaartal.com/2012/01/18/dicen-los-expertos/

SI NO FUNCIONA, SE CAMBIA.

Los autollamados de izquierdas no comprendemos la desafección de quien pretendemos tutelar.
Pues, esta es lo normal. Ellos, en general, son incultos. Nosotros somos muuuy intelectuales. Sabemos de todo. Hemos leído la intemerata.  Y....,  lo que es más importante:
¡¡TENEMOS LA RAZÓN!!
Soltamos por aquí y acullá tremendos y sesudos "espiches".
A los amantes del flúmbol; de las telenovelas; de la charla tabernera....
Integrados en esa cultura de las masas. Tan pequeña y alejada de nuestra tremenda sabiduría apocalíptica.
Es normal:
Que les resbalen nuestra berborrea. Nuestra jerga ininteligible y rebuscada. Y, sobre todo, nuestra prepotencia. Que nos desprecien.
Luego nos fastidia que el lenguaje populista. Fácil. Llano. Asequible...
Cale más en sus mentes e incline sus voluntades a quien les encadena.
El error es nuestro. No es el sesudo sermón el que hace "miseros", sino el cotilleo y la camaradería.
Dejémos de regodearnos en nuestro ombligo. No es más que un hoyuelo residual.
No nos funciona el discurso. Perdemos la calle. Las tabernas. Los talleres. Los campos. Las oficinas. Los hogares. Perdemos a la gente.
¿CAMBIAMOS?





EL CASO HÚNGARO.

La cuestión es , como siempre, en la difusa frontera de las ideologías entre mafias sectarias, llamadas partidos políticos, que nos falta la observación personal directa y el estudio de aquello que los "mass media" nos muestran como realidad,
¿Y si el tal Orban y quienes le apoyan no son lo que nos dicen aquí? Parece que los húngaros les aprecian menos corruptos.
Viene a ser algo así como lo que no entendemos de los países cuyos nacionales votan a los clérigos musulmanes de ciertas organizaciones llamadas fundamentalistas.
De lo que yo he colegido de primera mano, les votan porque son quienes auxilian al débil y quienes son menos corruptos.
Quien nos roba abusando del poder por delegación, se autodefina como quiera, es para mí un nazi asqueroso.
Salud. 
Esta valoración la he publicado primero en "LA BARRICADA..." Y a Marat no le ha gustado mucho.

LA GARZONADA JUDICIAL. OPORTUNIDAD.

Esta situación, que es tantico insólita, crea expectativas positivas.
Todos sabemos lo difícil que es entubar a un juez.
La aceptación por los tribunales de estas querellas contra uno, (¡De los suyos, madrecita!),  ¡por prevaricación!; da pié a pensar que, a partir de ahora, los ciudadanitos tenemos posibilidades de denunciar con éxito a jueces prevaricadores.
Yerran mucho, los muy rateros.
Salud.