Satisfacer un poco el ego.
Para por si a alguno le sirve para algo.
Aunque sea sólo eso de leer o pensar.
Procuraremos no pontificar mucho.
El yerro abunda más que el metal.
Pues, descrito. Lo que hay es lo que se ve.
Salud.
La
provincia Oriental de Arabia Saudí, sita en el este del país, ha sido este
domingo el escenario de multitudinarias manifestaciones, en las que los
participantes solicitaron a la familia real Al Saud que renuncie al
poder.
Los
manifestantes han vuelto a tomar las calles de la ciudad de Al-Qatif para
condenar las políticas represivas del régimen saudí contra las protestas
pacíficas, según Press TV.
El jueves,
9 de febrero, una persona perdió la vida y varias resultaron heridas en
Al-Qatif, después de que las fuerzas de seguridad saudíes abrieran fuego contra
un grupo de manifestantes antigubernamentales.
Tras el
levantamiento de los pueblos de varios países árabes, las protestas en Arabia
Saudí comenzaron el pasado febrero en distintas ciudades y aldeas, especialmente
en las de la provincia Oriental, rica en petróleo, donde los ciudadanos saudíes
hacen hincapié en la necesidad de la liberación de todos los presos políticos,
la libertad de expresión y de reunión, así como el fin de la escalada de la
discriminación en el país árabe.
Las
manifestaciones se intensificaron luego de que el reino saudí enviara el pasado
marzo tropas militares a Baréin para brindar ayudas a la monarquía del rey Hamad
Bin Isa al Jalifa en la represión de las movilizaciones populares en este país
pequeño del Golfo Pérsico.
Sin
embargo, estas manifestaciones regulares se convirtieron desde el pasado mes de
noviembre en protestas directas contra el régimen de Al Saud, después de que las
fuerzas de seguridad abrieran fuego contra miles de manifestantes en la
provincia Oriental y asesinaran a cinco manifestantes.
Tanto la
Amnistía Internacional (AI) como la organización no gubernamental de
Observatorio de los Derechos Humanos han acusado al régimen saudí de violar los
derechos básicos de sus ciudadanos.